
- Técnicas de procesos de la gestión de proyectos
- Técnicas interpersonales y de comportamiento
- Técnicas de gestión tecnológica
- Rasgos de la personalidad positivos
Examinaremos brevemente cada una de estas categorías
Técnicas de procesos de la gestión de proyectos
Técnicas de procesos de la gestión de proyectos
En ocasiones también se les denomina "técnicas duras", consisten en los conocimientos y técnicas asociados a la mecánica de la gestión de proyectos. El administrador de proyectos (director) sin lugar a dudas, debe conocer a fondo las herramientas, técnicas y tecnología de procesos de gestión de proyectos, y ser capaz de aplicarlos. Así, por ejemplo, debería saber cómo se desarrolla el Acta de Constitución del Proyecto ó el Enunciado del Alcance del Proyecto, desarrollo del cronograma de trabajo, confeccionar un diagrama de redes y construir una estructura de desglose del trabajo (EDT), entre otros.
Sin estas técnicas apunta Gary R. Heerkens "será muy difícil coordinar y facilitar la creación de una plan de proyecto de alta calidad y mantener el control durante la ejecución del proyecto". Además asumiendo que estas técnicas son una expectativa básica de todo director de proyectos, es lógico suponer que se presenten problemas de respeto por parte de los miembros del equipo si el director es deficiente o presenta dificultades en esta área en particular.
Técnicas interpersonales y de comportamiento
La gestión de proyectos consiste en lograr que los miembros de un equipo realicen un trabajo determinado, por lo tanto las técnicas de interrelación personal poseen un enorme valor para el gerente a lo largo del proyecto. Las técnicas de comportamiento, a saber: la conducta, el estilo y el enfoque personales, están estrechamente asociadas a las técnicas interpersonales. A menudo al conjunto formado por estas dos técnicas (interpersonales y de comportamiento), se le denomina "técnicas blandas".
Veamos algunos ejemplos mencionados por Gary R. Heerkens en su libro "Gestión de Proyectos": liderazgo de equipo e individual, comunicación oral y escrita, resolución de conflictos, negociación, influencia, delegación, coaching y mentoring; podríamos además mencionar otras como la motivación, toma de decisiones y el conocimiento político y cultural. Las técnicas blandas pueden resultar especialmente complejas para aquellos gerentes que accedan a la gestión de proyectos procedentes de áreas extremadamente técnicas.